Zonalogística presenta en su última edición la quinta entrega de la serie “El diagnóstico logístico”
Entender la complejidad de cada negocio, es tal vez uno de los elementos más retadores y a los que se le debe prestar mayor atención por parte de un consultor al momento de abordar un proceso de diagnóstico logístico, debido a que el éxito del proyecto estará sujeto al nivel de interiorización de la problemática de cada negocio en particular y de ésta depende la calidad de los resultados.
En algunos casos los consultores mismos no alcanzan a entender la problemática con el nivel de profundidad necesario, lo que termina en resultados por debajo de las expectativas del consultor y de la compañía que lo contrata.
Lo anterior representa una ventaja significativa a los responsables de los procesos logísticos sobre los consultores, pues los primeros son los que conocen la problemática real de su negocio, las causas de los problemas y en un alto porcentaje las soluciones mismas o una buena aproximación a éstas. Partiendo de esta premisa, tiene mayores probabilidades de hacer un mejor diagnóstico el responsable propiamente del proceso sí tiene la intención real de mejorar el proceso (o la presión de la dirección) y utiliza las herramientas adecuadas para focalizar los esfuerzos.
En esta entrega se abordará el tema de la priorización, un tema tan importante que no sólo sirve para un proceso de diagnóstico, sino para entender e identificar las palancas fundamentales (problemas a ser resueltos) que afectan el comportamiento de cualquier sistema, que en el caso que nos interesa, puede ser el proceso de almacenamiento, transporte, servicio al cliente, abastecimiento y planeación de inventarios.